Durante un viaje a Viena, el protagonista es interrogado por un agente de aduanas, que le somete a las preguntas burocráticas con las que los representantes de la autoridad hacen valer su poder con el único fin de que el individuo se sienta indefenso y humillado. Expediente, el relato de Kertész, le vino a la memoria a Péter Esterházy cuando él mismo se vio involucrado en una situación similar en un viaje a Viena. Esterházy decidió entonces escribir Vida y literatura, su propia versión de esa anécdota, aparentemente banal, pero que recuerda la persistencia de las huellas de tiempos peores.
Hijo de un matrimonio de burgueses judíos, nació en Budapest (Hungría) en 1929. Durante la Segunda Guerra Mundial, en 1944, fue deportado con tan sólo catorce años al campo de...