Chamberlin, Paul Thomas
Es profesor titular de Historia de la Universidad de Columbia. Es autor de The Cold War's Killing Fields y de The Global Offensive, y ha publicado artículos en The New...
Es probable que la Segunda Guerra Mundial sea el conflicto más estudiado de la historia de la humanidad. Sin embargo, la gran mayoría de las obras ofrecen de ella una interpretación sorprendentemente unidimensional. La presentan como una guerra buena, una cruzada contra el fascismo y una batalla del mundo libre y democrático contra quienes querían acabar con él: una parábola de los males del totalitarismo y el triunfo del orden democrático liderado por los Estados Unidos.
Este libro intenta retirar las capas de mitología que cubren la Segunda Guerra Mundial y poner en cuestión las interpretaciones predominantes de la contienda. Rompe con las explicaciones estándares de la guerra y argumenta que las dimensiones centrales del conflicto fueron la raza y el imperio. Aborda la Segunda Guerra Mundial como un enfrentamiento profundamente enraizado en el contexto más amplio de la historia mundial. Y de esta forma intenta excavar los cimientos coloniales de la guerra y trazar sus secuelas imperiales. Por ello, geográficamente, el libro se aleja de las playas de Normandía para hacer mayor hincapié en los teatros de operaciones más sangrientos de Europa del Este y Asia oriental.
En definitiva, Tierra quemada sostiene que el legado de la guerra no fue tanto la destrucción del fascismo, el racismo y el imperialismo, sino la creación de un orden de posguerra en el que Estados neoimperiales muy militarizados se prepararon para la guerra perpetua y la perspectiva de la aniquilación nuclear. Nuestra amnesia colectiva respecto de los orígenes coloniales de la guerra y sus consecuencias imperiales ha despojado al conflicto de su significado y lo ha convertido en un cuento de hadas del siglo xx. Este libro pretende colocar nuestra visión de la Segunda Guerra Mundial en el lugar que le corresponde en el panorama más amplio de la historia mundial moderna. Con este telón de fondo, la Segunda Guerra Mundial aparece como el punto culminante de siglos de expansión colonial y el catalizador de la reinscripción del imperialismo bajo la égida de la geopolítica de la Guerra Fría.
Es profesor titular de Historia de la Universidad de Columbia. Es autor de The Cold War's Killing Fields y de The Global Offensive, y ha publicado artículos en The New...