Goya ha sido considerado, por su actitud inconformista e inquisitiva ante la realidad, como el primero de los pintores modernos. Pero ¿cómo logró alcanzar tal destreza en la representación de la locura, el dolor físico y la crueldad? Robert hughes, el crítico de arte más relevante en lengua inglesa, nos propone estudiar el cambio radical que llevó a Goya de sus primeros cuadros, alegres, luminosos y sensuales, al universo torturado, oscuro y amenazante de las «Pinturas negras» o «Los desastres de la guerra». Una investigación que simultáneamente va describiendo la España de su tiempo que se debate entre el mundo racional y ordenado que proponía la Ilustración y el infierno de las supersticiones, la miseria y la guerra con la que el pintor y sus contemporáneos tuvieron que convivir a diario.